LA PERSUASIÓN EN LA PUBLICIDAD.

La seducción y la persuasión son una de las mejores técnicas publicitarias. La técnica publicitaria ha evolucionado desde la persuasión a la seducción.

Entendemos por persuasión la exposición de razones (reales, inventadas o manipuladas) para intentar cambiar la actitud del receptor del mensaje.

En la seducción, por el contrario, la imagen del producto se muestra ante el espectador, le sugiere una idea o sensación bella o placentera... sin dar argumentos racionales, aspira a que el receptor decida elegirlo.

Se puede decir que la irrupción de la seducción en la publicidad supone pasar del "Mira que bueno es lo que tengo. ¡Cómpralo!" a "Mírame, yo soy para ti. Ya sabes donde encontrarme".

Los mensajes seductores presentan las siguientes características:

  • Los personajes se sustituyen por modelos.
  • Muestran lo deseado por el receptor.
  • Utilizan el primer plano del objeto, el cual llena casi toda la pantalla.
  • Omiten el contexto que rodea al producto.
  • Lo deseable está en la imagen. Es la propia imagen.
  • No recrean espacios creíbles, sino que buscan que la imagen sea atractiva para el receptor.
La finalidad de las imágenes seductoras es ser atractivas a la mirada del receptor y no necesitan recurrir a un argumento lógico.

LA PUBLICIDAD SUBLIMINAL.

La publicidad subliminal consiste en crear un mensaje a través de una imagen, vídeo, sonido o texto que pase totalmente desapercibido en el consciente para que lo procese el inconsciente y obligue al usurario a realizar una acción. A través de diferentes colores, formas y palabras se logra que el público haga asociaciones sutiles entre una marca y un significado intencionado.
Dicho de otra manera, la misión de este tipo de publicidad es hacer trabajar el inconsciente del usuario para que sienta la necesidad del producto o servicio que expone.

TIPOS DE PUBLICIDAD SUBLIMINAL:

Textos. En este caso, su mejor definición sería mensaje subliminal, porque los textos son eso: mensajes. Es el más difícil de todos los métodos.

Imágenes. La publicidad subliminal en imágenes genera un gran impacto. Una imagen es información y el cerebro la almacena, haciendo que la recordemos y analicemos aunque no seamos consciente de ello. En la calle hay infinidad de pancartas o anuncios publicitarios.

Vídeos. Es el método más utilizado para las campañas publicitarias porque se pueden poner en escena una serie de factores que el consciente quizás no tenga la capacidad de apreciar.

Logos. El logo es la manifestación filosófica de una empresa y de las intenciones que tiene. En la mayoría de los casos, no se aprecian este tipo de mensajes porque el usuario se centra más en el diseño que en el significado del logo en sí. Gracias a ello, las empresas lo aprovechan para enviar mensajes subliminales.

Olores. Últimamente se está implantado la tendencia a relacionar una determinada marca con un determinado olor, de forma que al sentir esa fragancia automáticamente la relacionemos con el producto.

PROCEDIMIENTOS:

Imágenes escondidas. Figuras implícitas envueltas en figuras explícitas.

Ilusiones visuales. Juego entre líneas y espacio en blanco de tal modo que las líneas componen unas figuras y el espacio entre esas líneas compone otras figuras distintas.

Doble sentido. Imágenes que tienen un significado plano pero que encierran un doble mensaje.

Emisiones de ultra frecuencia. Producción de imágenes o audio a gran velocidad.

Luz y bajo sonido de alta intensidad. Centra la atención del receptor en un solo elemento.

Ambientación de luz y sonido. Se intenta que los receptores sientan las emociones que desean.

Olores. El receptor lo relaciona automáticamente con el producto.