El arte conceptual es una tendencia artística en la que el concepto tiene preferencia sobre el objeto artístico real.
El término fue acuñado en 1967 por el artista Sol LeWitt, quien le dio su nombre al nuevo género en su ensayo “Paragraphs on Conceptual Art”, en el que escribió: “La idea en sí misma, aunque no sea visual, es tanto una obra del arte como cualquier producto terminado”.
La idea es lo importante.
La ejecución es algo superficial.
Lo realmente importante es la planificación y las decisiones que se toman de antemano.
No tiene que ser precisamente bonito. Tiene que transmitir su idea.
Para transmitir una idea los artistas se pueden valer de muchas cosas, desde las técnicas tradicionales, hasta otras como el texto, la fotografía, el video o la performance. A veces ni eso. A veces la obra es un telegrama, un manual de instrucciones, una conversación o una lata de mierda.