El arte abstracto es el contrario al figurativo y defiende la intención de no representar seres u objetos concretos, contemplándose únicamente elementos de forma, color, estructura o proporción.
Existen dos vertientes:
Arte abstracto expresivo. El protagonismo es la expresividad del artista que se vuelca en el gesto, el material y el sentimiento que provoca la obra. Es, por tanto, subjetivo, ambiguo e interpretable.
Arte abstracto geométrico. Pretende ser objetivo y universal, por lo que la composición es estructurada y que evita toda expresividad mediante el uso de la geometría, pretendiendo evocar claridad y precisión.
Arte abstracto geométrico. Pretende ser objetivo y universal, por lo que la composición es estructurada y que evita toda expresividad mediante el uso de la geometría, pretendiendo evocar claridad y precisión.